Pranayama
Autor: Autor: Eduardo Giner
Ciencias Sagradas de la Red Mundial GFU
Se le puede definir como la ciencia del control consciente de la respiración; así se le ubica en el cuarto método del Yoga. Aquí es importante resaltar que la palabra pranayama es el resultado de la unión de los términos Prana (energía vital) y Ayama (control, disciplina).
Asimismo, Serge Raynaud de la Ferriere señala que: ”Todas las cosas son un compuesto de Akasha y de Prana (cuerpo vulgar y cuerpo sutil), el compuesto material y la fuerza creativa, el uno negativo y el otro positivo, amalgama de célula visible que forma una materia cualquiera y la esencia vital; es como decir el físico y el espíritu”.
Sin embargo, el pranayama no es la realización de ejercicios respiratorios, es algo que va más allá de los ejercicios físicos, fisiológicos, neurales, aun cuando sí influye en el metabolismo del cuerpo humano y en las actividades psicológicas y cerebrales, lo que resulta en el valor educativo y espiritual que tiene. Tanto los textos de Yoga como la experiencia de siglos atestiguan que el control de la respiración constituye un factor importante en el control de la mente.
Los antiguos sabios conocían que todas las funciones del cuerpo humano estaban asociadas a cinco tipos de energía vital o prana vayus: 1. Prana Vayu, 2. Apana Vayu, 3. Samana Vayu, 4. Vyana Vayu, 5. Udana Vayu, los cuales son aspectos específicos de una única fuerza cósmica (viento vital) que representa al principio primordial de todos los seres.
- Prana-Vayu (Polo de entrada) se mueve en la caja torácica y controla la respiración, incluye los mecanismos sutiles de absorción del prana, siendo las vías respiratorias un órgano esencial para la captación del prana junto con la piel y la lengua. La absorción del alimento sólido o líquido depende también de Prana- Vayu.
- Apana-Vayu (Polo de salida) es el prana más importante del cuerpo, se mueve en la parte baja del abdomen y todas las funciones de excreción dependen de él. También activa los riñones, filtra la orina, relaja los esfínteres, dirige las heces hacia el recto, expulsa la menstruación, evacúa el exceso de agua por la transpiración, incluso Apana-Vayu trabaja durante el parto.
- Samana-Vayu (Asimilación) se encarga de avivar los fuegos gástricos ayudando a la digestión, mantiene a los órganos abdominales en armonía; por ello todas las funciones de asimilación de nuestro cuerpo son dirigidas por este prana, incluso conduce nuestros alimentos hacia el hígado. Su asiento principal está entre el diafragma y el ombligo.
- Vyana-Vayu (Distribución) impregna todo el cuerpo, asegura la circulación sanguínea y linfática, así como la circulación de la energía nerviosa. Actúa como un elemento integrador del cuerpo humano.
- Udana-Vayu (Expresión) se asienta en la garganta y su función primordial es permitir que el ser humano se exprese mediante la palabra para que aflore su pensamiento. También regula la cantidad de aire espirado y la tensión de las cuerdas vocales al hablar.
Por ello es importante destacar que la absorción del prana, en cualquier forma o en cualquier lugar del cuerpo que se produzca es trabajo de Prana Vayu, que es el polo de “entrada”. En cambio, todo cuanto sale del organismo, de cualquier forma y a cualquier lugar, es controlado por Apana-Vayu. De ahí que, para nuestra salud psicofísica, prana y apana deben estar en equilibrio.
Podemos añadir a lo anterior que la respiración externa habitual sólo comprende dos fases: la inspiración y la espiración. En las prácticas del Pranayama, se agregan dos fases de retención por lo que la respiración comprende cuatro tiempos:
- Rechaka: espiración.
- Kumbhaka (bahya): retención con los pulmones vacíos.
- Puraka: inspiración (cuya eficacia depende de la fase
- Kumbhaka (antara): retención con los pulmones llenos.
La entrada de aire (puraka) es la absorción de energía cósmica; la inspiración-retención (antara Kumbhaca) es la unión del Sí-mismo Universal con el Sí-mismo individual; la salida del aire (rechaka) es el abandono de la energía individual, seguida de la espiración-retención (bahya KumbhaKa) en la cual el Sí-mismo individual y el Universal se funden. Este es el estado de nirvikalpa samadhi, según B. K. S. Iyengar.
Por medio de la práctica constante del pranayama, surge una modalidad de Kumbhaka a la que se denomina Kevala Kumbhaka, en la cual, la respiración cesa como la conciencia del movimiento y surge una completa sensación de tranquilidad. Es una experiencia natural y trascendente.
Conviene resaltar que el objetivo inmediato de los diversos ejercicios de pranayama con Kumbhaka es estimular la respiración interna, y por ello, hay que señalar que existen dos tipos de respiración: a) la respiración pulmonar o externa y b) la respiración celular o interna.
Como su nombre lo indica, la respiración pulmonar o externa se efectúa en los pulmones, e incluye todos los mecanismos nerviosos y musculares que facilitan la inhalación de aire desde el exterior, el intercambio gaseoso en los alvéolos y la expulsión del aire viciado.
La respiración celular se produce en cada célula, y es el verdadero propósito de la respiración externa. Mediante ella, las células reciben el aire del Océano Cósmico con ayuda de los pulmones y se produce un intercambio: toman oxígeno y liberan anhídrido carbónico, lo cual genera una transpiración celular profusa que reactiva los procesos metabólicos del organismo y consigue su revitalización.
Por este proceso de combustión intracelular, el cuerpo se magnetiza, y la energía desprendida –el prana liberado- queda disponible para fines psicofisiológicos elevados.
De igual manera, un aspecto indispensable en la práctica del pranayama es la ejecución de las Bandhas que constituyen auténticos cierres y canalizaciones de la energía, los cuales ayudan a disminuir las presiones producidas en el cuerpo y a proteger a los órganos del mismo.
Las Bandhas se agrupan en tres categorías fundamentales:
- Mula Bandha
- Uddiyana Bandha
- Jalandhara Bandha
Es obligatorio usar Jalandhara Bandha en toda retención del aliento (Kumbhaka) siempre que sea mayor de 10 segundos.
Entre los numerosos ejercicios de pranayama que existen, están los siguientes:
– Nadi Sodhana, el aliento purificante
– Ujjayi, respiración victoriosa
– Kapalabhati, respiración de fuego
– Bhastrica, respiración del fuelle
– Anuloma Viloma, respiración alteña
– Brahmari, respiración de la abeja
– Chandra Bhedana, respiración por una fosa nasal
– Sama vriti, respiración equitativa o cuadrada.