Martín Alarcón Novoa
El face es incluirlo en el tiempo,
es abrir o cerrar la ciencia,
es la quietud o libertad,
es decidir a cuál horizonte abordar.
No es curiosidad,
es el sentido propio y natural,
conocerme que conocer,
abrigarme en la tormenta inusual.
Elijo abrír la cortina del conocimiento,
el tumulto de palabras ensordece,
las redes, son redes sin salida,
como pez aturdido.
Bombardeo inútil e inusual,
es un uber sin rienda,
escuchando y andando austero,
un atajo enriquece.
Basta con cerrar los ojos,
luz de aire que alimenta,
errados comentarios vanos,
me basta conocerme.
Ramas retorcidas y admiradas,
de un camino cálido y expuesto,
ahí está escondido,
solo para regocijar el interior.
Nada más válido que la serenidad,
raíces erigiendo sombra,
sombra en la sed,
saciando el hambre de ser.
Alto-sigue,
las redes no existen,
porque las redes no saben que existimos,
bajan en la próxima.
Son los caminos que te llevan,
y la libertad por conducir,
símbolos, palabras y ríos,
prefiero la equidad.