Mario Ensástiga Santiago
Una vez que Morena logró constituirse, de manera indiscutible, en la primera fuerza política electoral del país, el 2 de junio del 2024, y posteriormente alcanzar la mayoría calificada en el Congreso de la Unión e iniciar un paquete de reformas constitucionales encabezadas por la Reforma del Poder Judicial, se observan nuevos escenarios políticos por venir. A poco más de 3 meses de la la toma de protesta de Claudia Sheinbaum como Presidenta México, se empiezan a presentar interesantes y preocupantes procesos políticos nacionales e internacionales, me quiero enfocar a la recomposición del cuadro político partidario nacional, tanto de las fuerzas de izquierda como de derecha.
El partido Morena vive a su interior una situación complica y claramente contradictoria a los postulados de la 4t, las recientes afiliaciones de Yunes Márquez expriísta y expanista en Veracruz y el nombramiento de Jorge Lavalle como Secretario de Desarrollo Económico en Campeche, son personas reconocidas por su mala fama pública que han provocado la manifestación de inconformidades en algunas entidades del país.
Ambos personajes ciertamente conocidos a nivel nacional tienen sus similares en los estados y municipios, este tipo de políticos y políticas se les conoce popularmente como “chapulines”, por ser en el pasado reciente, personas provenientes de otras experiencias ideológicas y políticas opositoras a las fuerzas de izquierda y progresistas de México, aun más, en algunos casos abiertamente contra la 4t y contra AMLO, sin embargo, cínica, contradictoriamente y sin rubor alguno se han incorporado a Morena, a gobiernos, bancadas legislativas y listas de aspirantes a ocupar próximamente como en Veracruz y Durango a un cargo de elección popular en los ayuntamientos que van a disputarse electoralmente el próximo primero de junio de este año.
Este nuevo episodio interno de Morena, seguramente como en otros tantos que ha vivido en su corta vida, será superado formal y salomónicamente, pero en la práctica cotidiana de los próximos meses y años pueden presentarse situaciones difíciles de superar, debido a que si bien es cierto que las y los “chapulines” de renombre no son muchos, si tienen una larga trayectoria de colmillos bien retorcidos que fácilmente arriban y se colocan en los espacios de control y ejercicio del poder político en beneficio personal y de sus allegados, la historia política nos ha enseñado cuando hay casos de esta naturaleza, que los agentes de otros partidos y alianzas sirven efectivamente para ganar elecciones, pero no para gobernar desde los principios y postulados en este caso de la 4t.
Ante este panorama morenista, es evidente que personas afiliadas y simpatizantes decepcionadas se han ido poco a poco distanciando sin llegar necesariamente a la renuncia de la afiliación partidaria o de su calidad de simpatizantes, fuera de Morena hay personas de izquierda que si bien no están en contra de Morena, han decidido ya buscar otras opciones político partidarias, hay varias experiencias e intentos locales a lo largo del país para conformar nuevas expresiones sociales y políticas que está por verse que tanto maduran, como la impulsada por Camilo Valenzuela y otros hombres y mujeres de la izquierda mexicana de hace décadas que han venido trabajando la conformación del Partido del Socialismo Mexicano.
Por otra parte, el Instituto Nacional Electoral (INE) informó que han iniciado los trámites para registrarse como partido político 89 organizaciones rumbo a su reconocimiento en el proceso 2026-2027, entre esas gestiones hay grupos de ultraderecha y otras expresiones de la oposición mexicana a la 4t, agrupamientos de derecha que ya no ven como opción al PRI, al PAN y mucho menos en el PRD de Michoacán, partidos que quedaron seriamente disminuidos tras las elecciones presidenciales del 2024.
El Frente Cívico que busca registrarse como partido político con el nombre de Somos México, mismo que en algún momento se autodefinio como la Marea Rosa al convocar y organizar movilizaciones masivas en todo el país para protestar contra las iniciativas de Andrés Manuel López Obrador, que aunque llenaban plazas, los resultados en las urnas reflejaron claramente el desprecio que la la mayoría del pueblo de México les tiene a esas expresiones políticas de derecha.
En Somos México participan ex militantes del PAN, PRI y PRD, como Emilio Álvarez Icaza hijo der un viejo amigo de izquierda democrática, que por algún tiempo fue amigo de las organizaciones sociales y populares de izquierda, qué pena; otros personajes como la expriista Beatriz Pagés; los experredistas Cecilia Soto, Guadalupe Acosta Naranjo y Edmundo Jacobo, este último y tiempo atrás exsecretario ejecutivo del INE. son algunos que seguramente veran frustradas una vez más de querer encarar y derrotar a la 4t, aún cuando logren su registro político.
En la misma lista de organizaciones opositoras al actual régimen político encabezado por Claudia Sheinbaum, se encuentra la organización de ultra derecha Viva México promovida por Eduardo Verastegui ex actor vinculado a la ideología política y económica de Donald Trump; de igual manera el Partido México Republicano encabezado por Juan Iván Peña Neder que fuera funcionario de la Secretaría de Gobernación ligado a la exdirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Elba Esther Gordillo, promotor del llamado “conservadurismo pronorteamericano”.
Está por verse si Morena con los 10 millones de nuevos afiliados se propone además de continuar la ruta electoral, quiera elevar su capacidad política de transitar más al centro-izquierda, porque los escenarios internos con los Chapulines tienen serias dificultades internas y externas para desplazarse más a la izquierda; de lo contrario Morena seguirá siendo un partido más cercano a la Social Democracia que a la verdadera izquierda de México.
Si no quiere perder a la izquierda, no solo partidaria, sino también académica, científica y cultural, tendrá que alinear y disciplinar a los llamados «chapulines», de lo contrario puede empezar a tener problemas como los que vivió el PRD, ante la disputa palaciega de los grupos internos como ya los estamos viviendo en muchos municipios y estados de la República, mismos que se agudizarán de cara a las elecciones intermedias del 2027; así paso cuando los “Chuchos” se apoderaron de la dirección del partido del Sol Azteca. Michoacán, por cierto, no es la excepción ya que las contradicciones están desde ahora a la vista por la gubernatura y muy pronto lo veremos en lo relacionado a las presidencias municipales y diputaciones.
Los dirigentes de Morena a todos los niveles tendrán que ponerse las pilas en torno a estos asuntos de carácter interno, los escenarios internacionales de la persistente lucha de las izquierdas y derechas a nivel nacional e internacional, particularmente en nuestro continente lationamericano no están nada fáciles; los gobiernos estatales y municipales de la 4t, por lo que yo alcanzo a ver, tienen que mejorar sus procesos de identidad ideológica política, a decir verdad en su mayoría no están a la altura del trabajo del gobierno nacional del Segundo Piso de la 4t encabezado por Claudia Shienbaum.