Luis Manuel Rodríguez García nos ofrece:

 

HUELLAS EN EL POLVO

Poeta Luis Girarte Martinez.

37

Cuando vengas,

no me escondas el rostro con velos de ceniza

ni preguntes por mi

obstruyendo la luz que pasa por la puerta.

 

Ven. Entra a mi casa.

Encuéntrame en la esquina de la siembra.

No me preocupa el punto ni la hora.

Es el polvo en la boca

y la noche en los ojos lo que cuenta.

 

Aquí estoy para ti,

dulce amada enemiga,

bajo la sombra de los fresnos,

sobre el camino que no dará otra vuelta,

contra la tarde que gastó sus cerros,

frente a los crucificos de todas las tormentas,

ante la incertidumbre del silencio y la estrella.

 

Cuando vengas,

no te anuncies.

Encuéntrame en el punto y la hora que tú quieras.

 

38

Nada habrá que dejar para mañana. Nada.

Tampoco quiero recoger los recuerdos.

Para escapar contigo

basta una luz y un sueño,

una fuerza, un instinto

y un canto de trigales.

 

Al libro de la vida

nadie querrá escribirle,

en la última página,

la balada del amor infinito.

 

Sólo tú,

eterna protectora,

madre de ausencias,

incitándome al viaje

que con el fuego del placer inicio.

 

Deja un comentario