Por: Joel Coria Uribe
Decía el Doctor Julián Rodríguez Sesmas en su discurso al recibir la Presea” Primo Tapia de la Cruz”, con que le honro la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos de Michoacán, que cuando los débiles se organizan generan una fuerza tan poderosa que es capaz de transformar los latifundios en ejidos, se promueven cambios asombrosos de justicia social y económica, lográndose una verdadera redistribución de la riqueza.
Resulta entonces claro que la fuerza de los campesinos e indígenas es la unidad para exigir sus derechos y para que se organicen para concretizar los propósitos que su identidad les marca para hacerse reconocer como un grupo actuante que sabe bien a donde va y como se deben hacer bien las cosas. Por eso Primo Tapia es el paradigma del líder que requiere la clase campesina e indígena, y que actualmente reclama la sociedad en general.
El dirigente Estatal de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos de Michoacán, Ing. Felipe de Jesús Contreras Correa, señaló en el acto luctuoso que más allá de las diferencias religiosas, políticas, o de otro tipo, se debe fortalecer la unidad de los campesinos y de los indígenas para producir los alimentos que la población necesita, que se debe seguir trabajando en unidad para tener un mejor nivel de vida en el campo, y que se requiere por encima de los desencuentros y las polarizaciones partidarias, exigir los apoyos y los programas que el campo michoacano necesita ante los descuidos en la atención que se tiene actualmente.
A 96 años de su muerte se realizó ayer el acto luctuoso en Naranja de Tapia, con la presencia de la Delegada Nacional cenecista, Emma Mondragón Navarrete, el delegado regional, así como contando con la asistencia del Presidente Municipal de Zacapu, Luis Felipe León Balbanera, el ex dirigente estatal de la CNC, Jaime Rodríguez López, y de la población de este lugar que mantiene vivo el recuerdo de Primo Tapia de la Cruz.
